Según la OMS una de las principales vías de trasmisión del COVID-19 es el contacto con superficies contaminadas. Por esta razón, una desinfección consecuente es de gran importancia para prevenir el contagio.
FUMIGACION DSJ. Para la desinfección de espacios utilizamos equipos de nebulización en frío. Estos consiguen, a partir de un líquido, una niebla formada por gotas de un tamaño de partícula que oscila aproximadamente entre 20 y 30 micras.
Función de desinfectante
El desinfectante es dispersado en forma de pequeñas gotas similares a la niebla, utilizando el aire comprimido que crea el equipo como fuerza impulsora para la formación de la misma. De esta forma, la neblina, que se comporta como un gas, alcanza todas las áreas del local, accediendo a rincones o zonas que serían inaccesibles mediante una aspersión convencional. Las pequeñas partículas de agua en las que se encuentran disueltos los principios activos biosidas del desinfectante, se depositan sobre las superficies de toda el área tratada, formando una delgada película sobre ellas, logrando la desinfección de toda el área.
Los productos desinfectantes más usados para esta aplicación son, habitualmente, amonios cuaternarios, peróxido de hidrógeno, ácido peracético y glutaraldehído.
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